III. DIAGNÓSTICO DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE QUERÉTARO

 

 

 

3.1 Historia

3.2 Situación actual

3.2.1 Área Sustantiva

3.2.1.1 Atención a la demanda estudiantil

3.2.1.2 Evaluación del modelo académico: limitaciones y posibilidades

3.2.1.3 Perfil de profesores

3.2.1.4 Investigación y posgrado

3.2.1.5 Extensión, difusión y servicio

3.2.2 Área Adjetiva

3.2.2.1. Personal administrativo

3.2.2.2 Apoyo académico

3.2.2.3 Apoyo administrativo

3.2.2.4 Financiamiento

3.2.2.4.1 El déficit financiero en la UAQ

3.2.3 Área Regulativa

3.2.3.1 Legislación

3.3 Retos de la Universidad Autónoma de Querétaro

3.4 Espíritu de la Reforma Universitaria

3.4.1 Estado del proceso de Reforma Universitaria

3.4.2 Estrategia para la Reforma Universitaria

 

 

3.1 Historia

La Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) tiene su antecedente remoto en la época virreinal del Siglo XVII, con la creación de los Colegios Jesuitas de San Ignacio y San Francisco Xavier. Desde los anales de la Universidad se ha tenido muy clara su vocación de formación humana, como un instrumento para que la sociedad de aquella época no perdiera el sentido del progreso y supiera siempre que el ser humano es el centro del desarrollo; si ese centro se pierde, lo mismo ocurrirá en el sentido del desarrollo. Mucho tiempo después, en 1950, se cierra de manera definitiva el Colegio Civil, dando paso, en 1951, a la fundación de la Universidad de Querétaro, por decreto del Congreso del Estado de Querétaro.

La oferta educativa de la Universidad, en el año de su creación, contaba con las Escuelas de Preparatoria, Derecho e Ingeniería, en ésta última, dos años se cursaban en Querétaro y el resto en la UNAM. Posteriormente, en 1952, se crearon las Escuelas de Química y Enfermería. En 1953 se fundó la Escuela de Bellas Artes, y un año después, la de Contabilidad.

De 1954 a 1963 no se presentaron acontecimientos fundacionales en el campo profesional. Sin embargo, hay un evento importante para la historia de nuestra Alma Mater: el 5 de febrero de 1959 se inicia el régimen de autonomía. Este se presenta estando como rector el Licenciado Fernando Díaz Ramírez, quien además estuvo a cargo del proyecto de creación de la Universidad, en 1950. En 1963 se crea la carrera de Administración de Empresas en la Escuela de Contabilidad; en 1967, la Escuela de Psicología y el Instituto de Idiomas. Años más adelante aparecen las Escuelas de Medicina (1978), Sociología (1984), Veterinaria y Zootecnia (1985), Filosofía (1985), Informática (1987), Nutrición (1988) y Biología (1990). En 1995, las carreras de Veterinaria y Zootecnia, Nutrición y Biología se integran para conformar a la Facultad de Ciencias Naturales.

De acuerdo con su Ley Orgánica, los periodos de rector y directores son de tres años, con la posibilidad de una reelección de manera consecutiva, situación que ha ocurrido en los últimos periodos rectorales (1982-1988, 1988-1994 y 1994-2000).

En la actualidad, nuestra Institución ha evolucionado en un grado notable procurando siempre que el desarrollo del cambio no se desligue de su carácter humanista, y señalando como funciones sustantivas la docencia, la investigación y la extensión, en donde la transmisión, generación, aplicación y difusión del conocimiento, a través de la actualización de sus profesores-investigadores, se mantiene como una actividad permanente en beneficio de la sociedad a la cual se debe.

En este devenir histórico, si bien se ha tenido una fuerte orientación hacia la formación de recursos humanos, los retos también han ido variando de acuerdo con épocas y metas específicas. En este sentido, en los últimos 30 años, la UAQ ha dado un gran salto en su cobertura educativa diversificando sus programas en los diferentes niveles educativos, elevando sus estudios y ampliando su cobertura en el posgrado, desarrollando fuertemente la investigación, estableciendo vínculos con los diversos sectores sociales y extendiendo sus programas de difusión y servicio.

Hoy, los paradigmas que ligan al desarrollo de la sociedad, se diseñan a través de preceptos y esquemas donde la individualidad, la regionalidad e incluso la nacionalidad, se ven replanteados desde el fenómeno de la globalidad. Esto, sin duda, implica que la estructura educativa en la que se encuentra nuestra Universidad se vea inmersa en retos impostergables, en donde los elementos de desigualdad e inequidad social son sumamente frecuentes y profundos. No obstante lo anterior, la institución asume su responsabilidad como Universidad pública para ligar sus intereses institucionales con los requerimientos sociales.

Por este motivo, para los universitarios, es una oportunidad para redefinir el rumbo y los cambios sufridos en la Universidad en los 50 años de su historia, que orgullosamente estamos celebrando. Dado que las demandas también han crecido y son más exigentes, es momento de plantear un cambio profundo que permita a la institución consolidar sus posiciones y lanzarse a la búsqueda de nuevos logros. En este marco de condiciones, y con la voluntad decidida de los universitarios, la Reforma Universitaria se convierte en una necesidad impostergable.

3.2 Situación actual

3.2.1 Área Sustantiva

3.2.1.1 Atención a la demanda estudiantil

La UAQ está considerada como Universidad mediana. Conforme a los datos, al inicio del periodo escolar 2000-2001, cuenta con 16,531 estudiantes registrados en los 88 programas vigentes en la institución, (sin incluir líneas terminales), distribuida en los diferentes niveles educativos, de la manera siguiente:

 

CUADRO Nº 1

Distribución de la matrícula por niveles educativos y número de programas

Nivel

Nº de estudiantes

%

Nº Programas*

Cursos Generales de Idiomas y Bellas Artes

1,823

11.03

 

Técnico y Técnico Superior

295

1.78

5

Educación Media Superior

5,197

31.44

1

Licenciatura

7,741

46.83

34

Posgrado

1,475

8.92

48

Total

16,531

100.00

88

* Nota: En el caso del posgrado, sin considerar las líneas terminales, se cuenta con 24 Especialidades, 21 Maestrías y 3 Doctorados.

 

La población escolar de la UAQ se encuentra diferenciada, conforme a su distribución por género, en diferentes niveles educativos, como se muestra en el siguiente cuadro, en el que se puede observar que las mujeres ocupan un lugar privilegiado, en términos relativos, en todos los niveles, con excepción del posgrado.

 

CUADRO Nº 2

Distribución de la matrícula por género en los niveles educativos

Nivel

Mujeres

%

Hombres

%

Matrícula

Cursos Básicos de Idiomas y Bellas Artes

1,227

67.3

596

32.7

1,823

Técnico y Técnico Superior

241

81.7

54

18.3

295

Educación Media Superior

2,756

53.0

2,441

47.0

5,197

Licenciatura

4,517

58.4

3,224

41.6

7,741

Posgrado

726

49.2

749

50.8

1,475

Total

9,467

57.3

7,064

42.7

16,531

 

En tanto que la distribución porcentual de la matrícula de licenciatura, según las cifras del mismo periodo y conforme al modelo por áreas del conocimiento, se presenta como sigue:

 

CUADRO Nº 3

Distribución de la matrícula por Áreas del Conocimiento

Áreas del Conocimiento

% Matrícula en  Licenciatura

Ciencias Económico-Administrativas

33.2

Ciencias Jurídicas

17.1

Ciencias de la Salud

8.9

Ciencias Físico-Matemáticas

8.4

Humanidades

7.7

Ciencias de Psicología y Pedagogía

7.9

Ciencias Químicas

5.6

Ciencias Socio-Políticas

4.9

Ciencias Naturales

6.3

Total

100.0

 

Los convenios suscritos ante el Programa para el Mejoramiento del Profesorado (PROMEP), basados en la planeación al interior de las Dependencias de Educación Superior (DES), en el que una o más facultades pueden conformar una DES, establecen, que para el año 2006, existe el compromiso de abrir nuevos programas educativos en los niveles técnico, licenciatura, especialidad, maestría y doctorado, como puede advertirse en el gráfico siguiente: 

 

De la matrícula total del estado de Querétaro, en los niveles técnico, medio superior, licenciatura y posgrado, la UAQ tiene una cobertura total de 25%; sin embargo, a nivel licenciatura, la cobertura se incrementa hasta 31% y en el caso de posgrado, la UAQ cubre casi el 75% de la demanda de la entidad.

 

CUADRO Nº 4

Cobertura 2000-2001

Niveles

Querétaro

UAQ*

UAQ / QRO (%)

Técnico

5,269

295

5.6

Media Superior **

(propedéutica)

26,788

5,197

19.4

Licenciatura

24,397

7,741

31.7

Posgrado***

1,976

1,475

74.6

Total

58,430

14,708

25.2

 

Nota:       *No se incluyen alumnos de Cursos Básicos. 

**Se incluye solo el bachillerato general, sin incluir el Bachillerato de Artes.

***No se consideran los 2,458 alumnos del CIIDET que cursan la “Maestría de Enseñanza de las Ciencias” dado que es un programa a   distancia. 

 

La cobertura estatal de la Universidad es de 94.1% en Santiago de Querétaro y 5.9% en San Juan del Río. Lo anterior revela, además de una alta concentración estudiantil en la ciudad capital, la ausencia de unidades, programas académicos y servicios en los 16 municipios restantes.

 

CUADRO Nº 5

Alumnos por Campus y nivel al inicio del periodo 2000-2001

Nivel

Alumnos

Campus

Querétaro

%

Alumnos

Campus

San Juan

%

Total Alumnos

 

%

SJR/Total

%

Cursos Básicos

1,823

11.7

0

0.0

1,823

11.0

0.0

Técnico

240

1.5

55

5.6

295

1.8

18.6

Bachillerato

5,001

32.2

196

20.1

5,197

31.5

3.8

Licenciatura

7,015

45.1

726

74.3

7,741

46.8

9.4

Posgrado

1,475

9.5

0

0.0

1,475

8.9

0.0

Total

15,554

100.0

977

100.0

16,531

100.0

5.9

 

Sin embargo, en los últimos nueve años, la cobertura de la matrícula ha disminuido de 28.8% en 1992, a 25.2% en 2000.

Esta situación se convierte en una oportunidad para ampliar la cobertura y diversificar la oferta educativa en aquellos municipios del Semidesierto y la Sierra, en que, por ser zonas de concentración y afluencia de otros municipios con menor desarrollo, se observa una demanda creciente de servicios a los que la UAQ podría dar respuesta incorporando modalidades educativas diversas y el uso de las nuevas tecnologías.

La distribución actual de la matrícula expresa con claridad la concentración de los servicios en la ciudad de Querétaro, así como de la matrícula del área social y administrativa. Este cambio significativo en la cobertura estatal está en buena medida asociado a la creación de universidades e institutos de educación superior privados en la entidad, que concentran su matricula en los programas académicos de mayor demanda en áreas saturadas del mercado y con menores exigencias tanto de inversión para laboratorios, talleres, acervos, etc., como de recursos humanos dedicados a la investigación.

 

CUADRO Nº 6

Instituciones privadas en el estado

Porcentaje de programas en áreas saturadas

ITESM

UVM

CUAUHTEMOC

CUDEC

46%

65%

58%

100%

 

Si a ello aunamos las tendencias de crecimiento de la educación superior en Querétaro, podemos afirmar que uno de los grandes retos de la UAQ, es plantear un proyecto de crecimiento y de diversificación de la oferta educativa, ya que, de persistir dichas tendencias, en la próxima década, la UAQ perderá su capacidad de contribuir al desarrollo del estado, y la sociedad queretana lamentará que una de sus instituciones sociales más importantes resulte tan limitada en su capacidad de anticipación y respuesta a los principales problemas que la aquejan.

 

3.2.1.2 Evaluación del modelo académico: limitaciones y posibilidades

 

En lo que respecta a la revisión del modelo académico y organizativo, si bien ha sufrido modificaciones, como la de 1985, al conformar las Áreas de Conocimiento, no se ha efectuado una revisión a fondo del modelo académico. El crecimiento y desarrollo institucional ha correspondido al programa de trabajo de la administración en turno, sin que hubiera necesariamente una vinculación con el proyecto de la administración anterior.

En las condiciones descritas, el desarrollo académico de la UAQ enfrenta otros problemas básicos. Uno de los cuales es el modelo híbrido de organización; esto es, el modelo actual alterna entre la organización de Escuela y Facultades, el de Áreas del Conocimiento y, más recientemente, el de DES (Dependencias de Educación Superior).

El modelo que opera en la práctica es el de Escuela y Facultades, en tanto que los programas académicos son disciplinarios y los estudiantes, profesores e investigadores, tiene adscripción a la Escuela o Facultad y no a las Áreas de Conocimiento o a las DES. La estructura, los órganos colegiados, el personal académico y administrativo están orgánicamente determinados por este modelo.

Esto se hizo notar en 1996, en el informe presentado a la UAQ por el Comité de Administración y Gestión Institucional de los Comités Interinstitucionales de Evaluación de la Educación Superior (CIEES). Dicho organismo cuestionó la funcionalidad de ese “esquema de gobierno”. En este informe se considera que la forma de gobierno no permite la participación efectiva de la comunidad universitaria en la toma de decisiones. De igual manera se considera la presencia de otros problemas, tales como: que la asignación de responsabilidades es difusa y propicia confusiones, la conducción institucional carece de liderazgo y los esquemas de administración y legislación no corresponden a la realidad en que operan los programas y actividades de la Institución.

Adicionalmente, esta estructura ha propiciado el desarrollo de plataformas y herramientas en los sistemas computacionales sin un criterio normalizado, lo que ha dificultado el desarrollo de un sistema de información que apoye las labores de planeación, docencia, toma de decisiones y gestión institucional, entre otras.

Conforme a lo señalado, la organización académica y administrativa de la institución, requieren un reordenamiento estructural que le permita, principalmente, la definición pedagógica de su modelo académico. En este sentido, la UAQ precisa una nueva organización académica (definida con la participación de la comunidad universitaria, particularmente de los cuerpos académicos y órganos colegiados), administrativa y normativa, que propicie el mejoramiento de la calidad académica, así como el máximo aprovechamiento de los recursos humanos y materiales disponibles.

  Algunos de los problemas que enfrenta el modelo de la UAQ, pueden ser descritos de la manera siguiente:

  • La oferta educativa en el nivel de licenciatura es básicamente en áreas disciplinares, con modelos curriculares rígidos, con duración predeterminada, con exigencia de dedicación de tiempo completo y con pocas o nulas materias optativas. 

  • La organización curricular está sustentada en un modelo de enseñanza tradicional, altamente presencial, con baja participación de los estudiantes en el desarrollo del conocimiento y de escasa formación multi e interdisciplinaria.  

  • Este modelo curricular genera carreras caras, por su escasa matrícula.  

  • Los índices de eficiencia terminal son bajos, con respecto a algunas instituciones privadas en la entidad.  

  • Hay limitaciones  de infraestructura y ausencia de uso compartido de los espacios físicos,  bibliotecas, laboratorios, aulas, etc.  

  • Existen bajos niveles de actualización de los centros de cómputo, así como falta de espacio y equipo en relación con el número de estudiantes.  

  • Falta de actualización permanente de planes y programas de estudio.  

  • Hay desarticulación entre áreas sustantivas, niveles educativos, programas y dependencias.  

  • Ausencia de programas institucionales de tutorías para evitar el alto índice de reprobación.  

  • Ausencia de programas institucionales de evaluación y seguimiento de la eficiencia terminal en todos los niveles, así como del seguimiento de egresados.

A pesar de todo lo mencionado, y quizá como expresión de la falta de armonía en el crecimiento integral de la Universidad, existen programas académicos donde los estudiantes han alcanzado niveles nacionales de excelencia, reflejados en  reconocimientos y premios, como sería el caso de los estudiantes de Medicina que cada año ocupan los primeros lugares en los exámenes nacionales de residencia, así como también el posicionamiento de nuestros estudiantes de educación media superior en la Olimpiada Nacional de Matemáticas y Física, y muy recientemente los reconocimientos que obtuvieron los estudiantes de Ingeniería e Informática, en el concurso de diseño de robots.

Asimismo, como una muestra de la fortaleza institucional, fue la apertura desde 1996 a las evaluaciones de pares organizadas por la ANUIES - CIEES a la mayor parte de los programas académicos vigentes en las Facultades. En estas evaluaciones se manifiestan en términos generales muchas de las fortalezas mencionadas anteriormente, aunque también persisten algunas debilidades. 

Todo lo anterior ha sido identificado gracias a la cultura de la evaluación que en la UAQ ha tenido un impulso importante, proceso que comenzó a consolidarse a partir de los ejercicios de planeación suscritos en 1996 con la SESIC, conforme se establece en los Proyectos de Desarrollo de los Cuerpos Académicos del PROMEP.

Sin embargo, este proceso ha permanecido de manera sistemática a partir de la autoevaluación institucional que anualmente se realiza en la UAQ, así como de la evaluación que realizan los distintos comités de los CIEES. Las figuras siguientes nos muestran los históricos de los programas evaluados por Comités y Programas.

 

Como parte de esta voluntad, de hacer de la evaluación una constante institucional, la comunidad universitaria de la UAQ se ha propuesto emprender un proceso de profunda transformación de sus estructuras académicas y administrativas, así como de los programas y modalidades educativas, de tal manera que esto nos permita estar a la altura de las trasformaciones que ocurren en el conocimiento y sus impactos sociales. Por lo anterior la UAQ ha determinado la necesidad de realizar un proceso de Reforma Universitaria estableciéndolo como un proyecto de alta prioridad.

3.2.1.3 Perfil de profesores

El área de docencia está integrada por los profesores de los distintos niveles y programas que ofrece la institución. Son sin duda el mejor recurso de nuestra Universidad, que permite, permanentemente, la consolidación de la amplia gama de nuestras opciones educativas. Pese a ello, la necesidad de la actualización es una constante entre los profesores para mantenerse a la vanguardia del desempeño académico, no sólo en los diferentes campos del conocimiento, sino también en la formación didáctico-pedagógica.

No obstante el crecimiento, en los últimos cinco años del número de profesores de tiempo completo, pues en 1996 éstos representaban casi 20% del total, en tanto que para el año 2000 fue 28.6%, persiste un claro desequilibrio entre los tipos de contratación de tiempo libre y de tiempo completo, que afecta el nivel de profesionalización de la docencia y la investigación en la Universidad.

 

CUADRO Nº 7

Profesores-Investigadores por tipo de dedicación

Tipo de dedicación

1996-1997

1997-1998

1998-1999

1999-2000

2000-2001

Tiempo completo

324

341

354

364

395

Medio tiempo

17

21

18

17

21

Tiempo libre

1,284

1,338

1,031

1,037

963

Total

1,625

1,700

1,403

1,418

1,379

Fuente: Nómina quincenal de la Universidad Autónoma de Querétaro, no se incluye a los profesores de tiempo completo que cumplen funciones administrativas, ni tampoco profesores jubilados, discapacitados y pensionados.

 

A pesar del importante esfuerzo emprendido por la institución para incrementar los grados académicos de los profesores universitarios, a través del apoyo para cursar programas de posgrado tanto en nuestra institución como en otras del país y del extranjero con el apoyo tanto de las becas del PROMEP, como del  Programa de Repatriación del CONACyT, lo cierto es que, aún en estos momentos, el perfil del profesor universitario es fundamentalmente de licenciatura, como se puede observar en el siguiente cuadro.

 

CUADRO Nº 8

Perfiles académicos de los Profesores-Investigadores

Grado Académico

1996-1997

1997-1998

1998-1999

1999-2000

2000-2001

Pasantes / Técnicos

31

30

25

37

32

Licenciatura

1,085

1,118

902

773

787

Especialidad

91

95

93

159

132

Maestría

348

357

299

384

335

Doctorado

70

100

84

65

93

Total

1,625

1,700

1,403

1,418

1,379

Fuente: Nomina quincenal de la Universidad Autónoma de Querétaro, no se incluye a los profesores de tiempo completo que cumplen funciones administrativas, ni tampoco profesores jubilados, discapacitados y pensionados.

 

En 1996, casi 67% de los profesores de la UAQ tenían estudios de licenciatura y sólo 4.3% contaban con el grado de doctor. Para el año 2000 el porcentaje de profesores con licenciatura descendió hasta 57% y el de doctores ascendió a 6.7%.

Actualmente existen aproximadamente 230 profesores con estudios de maestría o doctorado, pero por diversas razones personales e institucionales no han podido obtener su grado, por lo cual se ha instrumentado un programa de regularización a fin de que lo consigan; sin embargo, el nivel de respuesta no ha sido suficiente para que así ocurra.

En función de los criterios del PROMEP y de los apoyos institucionales que se ofrecen a los profesores con perfil PROMEP (mínimo, grado de maestría y publicaciones recientes) es importante generar programas y mecanismos que estimulen la obtención del grado, como la consolidación del programa de becas para que los profesores accedan a estudios de posgrado, así como también un programa institucional de formación y actualización de profesores en función de las líneas de investigación y de los programas académicos.

Otro aspecto importante, en conformidad con los convenios PROMEP, y las recomendaciones de los CIEES, será la redistribución de cargas académicas para el desarrollo de los perfiles de los profesores de tiempo completo tendientes a la articulación de las funciones sustantivas. Como se puede observar en el cuadro siguiente, la mayor parte de los profesores de tiempo completo de la Universidad están concentrados en una sola de las funciones sustantivas, básicamente en docencia; aunque, como se puede observar, los desequilibrios entre Facultades son muy evidentes, mientras que en Ciencias Políticas y Sociales, Filosofía, Química y Ciencias Naturales existe una fuerte carga en investigación, en Contabilidad, Derecho, Medicina y Bachilleres la concentración es hacia la docencia.

 

CUADRO Nº 9

Distribución de cargas por función (hrs.)

Docencia

20,708

74.8%

Investigación

3,862

14.0%

Extensión

519

1.9%

Otras *

2,584

9.3%

Total

27,673

100.0%

 

* Funciones Administrativas, Becados y Año Sabático

Fuente: Recursos Humanos. Período 2000/2

 

Conforme a lo anterior, es posible observar tres problemas importantes en los perfiles docentes predominantes: en primer lugar el desequilibrio de las cargas entre las Facultades, la concentración en una sola función y la casi ausencia de la función de extensión.

Otro elemento importante en el perfil de los profesores de la Universidad está asociado a su antigüedad y edad promedio, pues esto se vincula con el diseño de una política de renovación de la planta docente. No existe en la actualidad una política institucional en este sentido. Con los ejercicios de planeación PROMEP, firmados entre la SEP y cada una de las DES, se propone también una política de renovación en función de los programas académicos vigentes y posibles, en función de las líneas de investigación. Sin embargo, la ausencia del grado de maestría en buena parte de los profesores de tiempo libre que tienen ya una antigüedad considerable en la Universidad, ha generado una distorsión entre las necesidades institucionales firmadas con la SEP y las políticas de contratación del personal académico.

3.2.1.4 Investigación y posgrado

La investigación es una de las funciones sustantivas que mayores avances ha mostrado en la UAQ durante los últimos 20 de años. A través de la investigación se ha promovido la participación de la Universidad con otras IES permitiéndonos destacar en los diferentes foros, nacionales e internacionales, y reorientar las expectativas de desarrollo hacia esta función en nuestras dependencias académicas.

Sin embargo, a pesar de que la creación de los primeros centros de investigación data de 1981, lo cierto es que no fue sino hasta 1994, a través del Programa de Estímulos a la Investigación (PEI), cuando hubo registro, seguimiento y evaluación de la investigación en la Universidad.

Como se puede observar en el siguiente cuadro, el número de investigadores que participan en el PEI se ha incrementado de 1994 a la fecha; también se muestra una clara tendencia a incrementar la presencia de los investigadores en las categorías superiores del programa.

 

CUADRO Nº 10

Número de investigadores  por año conforme al PEI

Categoría

1994

1995

1996

1997

1998

1999

I

39

40

45

54

53

60

II

17

27

44

39

21

23

III

15

16

23

29

38

42

IV

-

23

41

50

46

45

Total

71

158

153

172

158

170

Fuente: Archivo de la Dirección de Investigación y Posgrado. No existe información sobre el 2000 debido a que el programa de estímulos no ha abierto la nueva convocatoria hasta la fecha. Como nota aclaratoria cabe señalar que  en la convocatoria de 1994 no existía la categoría No IV.

 

En 1994 54.9% de los investigadores participaron en PEI incorporados en la categoría I; en 1999, 35.2%, lo hicieron en la misma categoría; en 1995, sólo 14.55% ingresó en la máxima categoría; y en 1999, 26.47%.

La productividad de los investigadores inscritos en el PEI ha ido en incremento de manera significativa. Esto lo podemos observar en la comparación de los años más recientes:

 

CUADRO Nº 11

Rubro

1997-99

1998-00

Diferencia

%

1999-01

Diferencia

%

Publicaciones con arbitraje

160

177

17

10.6

237

60

33.8

Publicaciones sin arbitraje

377

279

-98

-26.0

246

33

-11.8

Difusión nacional

756

772

36

4.8

665

-107

-13.86

Difusión internacional

169

142

-27

-16

187

45

1.31

Proyectos totales

379

367

-12

-3.2

247

-120

-32.6

Proyectos financiados

67

75

8

11.9

69

-6

-8

Proyectos no financiados

312

292

-20

-6.4

178

-114

-39.04

Formación–Licenciatura

45

50

5

11.1

55

5

10

Formación – Maestría

41

43

2

4.9

55

12

27.9

Formación – Doctorado

1

2

1

100

3

1

50

Evaluación

392

432

40

10.2

452

20

4.6

Otros

802

824

2

.2

608

-216

-26.2

Total

2,822

3,088

266

9.4

2,755

-333

-10.7

 Nota: La producción que se presenta corresponde a dos años en cada una de las versiones del PEI.

 

En cuanto a las limitaciones que presenta el PEI, cabe destacar que éste no está diseñado para fomentar la investigación colectiva, interdisciplinaria, ni interinstitucional. Tampoco articula con claridad la docencia con la investigación. La existencia en la actualidad de varios programas de estímulos (Desempeño del Personal Académico, PEI, PECEAYEC), que separan las funciones sustantivas con diferentes criterios no han sido un instrumento adecuado para la articulación del conjunto de funciones en los profesores de la Universidad, incluso desalientan esta articulación.

Por tanto, la información con que cuenta la Dirección de Investigación y Posgrado, lo mismo la proporcionada por los Centros de Investigación de las Facultades así como del propio PEI, da cuenta más bien de la productividad individual de los investigadores que de los avances de las líneas de investigación de cada Facultad.

A partir de la firma de los compromisos del PROMEP, cada DES o Facultad inició un programa articulado para integrar a sus investigadores en lo que se denomina Cuerpos Académicos. Es importante mencionar que la búsqueda de financiamiento para infraestructura de las Facultades se ha hecho a través de los FOMES, los cuales exigen la presencia de Cuerpos Académicos como receptores del financiamiento.

Todo esto ha generado en las Facultades una tendencia a organizar a sus profesores de tiempo completo, y algunos de 40 horas con dedicación exclusiva, en estos Cuerpos Académicos, en el entendido de que la investigación y la docencia dependen de ellos.

Sin embargo, la realidad dista mucho de acercarse a estos modelos; los procesos en el interior de las Facultades tienen diferentes rumbos y ritmos. Mientras que en algunas DES los cuerpos académicos se formalizan sólo con la intención de obtener financiamiento, pues la DES puede incluir más de una Facultad en su interior, en otros casos, las Facultades se han acercado al modelo de organización por grupos como sería el caso de Química, Ingeniería y Ciencias Naturales, y como un esfuerzo más reciente, también este modelo de cuerpos académicos está presente en las Facultades de Psicología y de Ciencias Políticas.

Como se mencionó anteriormente, la investigación no está distribuida uniformemente en todas las Facultades o DES. La siguiente figura muestra la distribución del número de proyectos de investigación presentados por cada una de ellas.

 

En esta figura lo que se está indicando es que, además de la distribución desequilibrada de la investigación por área de conocimiento, lo que existe es una variedad temática, antes que líneas institucionales de investigación.

En cuanto a la participación de nuestros investigadores en el Sistema Nacional de Investigación (SNI), es también un elemento destacable en el crecimiento de la investigación y productividad en nuestra institución. Mientras que para 1991 sólo había 12 investigadores registrados en el SNI, actualmente, contamos con 42 miembros de este sistema en las diferentes categorías.

A continuación se muestran dos cuadros en los que podemos observar los datos históricos relativos al incremento de investigadores registrados en el SNI y su distribución por dependencia académica.

 

CUADRO Nº 12

Miembros del SNI 1991 – 2000

Nivel

A ñ o

 

1991

1992

1993

1994

1995

1996

1997

1998

1999

2000

Candidato

9

10

5

7

6

10

7

6

8

9

I

2

2

4

4

6

6

14

16

20

29

II

 

 

 

 

1

2

1

2

2

3

III

 

 

 

 

 

 

1

1

1

1

Total

11

12

9

11

13

18

23

25

31

42

 

CUADRO Nº 13

Distribución de los investigadores miembros del SNI  1991-2000

Facultad

A ñ o

 

1991

1992

1993

1994

1995

1996

1997

1998

1999

2000

Ciencias Naturales, Biología

1

1

 

 

 

2

1

4

5

6

Ciencias Naturales, Nutrición

 

 

 

 

 

 

 

 

 

1

Ciencias Naturales, Veterinaria

1

 

1

 

 

 

 

1

1

1

Ciencias Políticas y Sociales

1

 

 

1

1

1

3

3

3

3

Filosofía

 

 

 

2

1

1

2

2

6

7

Ingeniería

3

3

2

1

3

4

6

4

5

9

Lenguas y Letras

 

 

 

 

 

 

 

1

1

 

Psicología

1

1

2

2

2

2

3

3

3

4

Química

4

7

4

5

6

8

8

7

7

11

Total

11

12

9

11

13

18

23

25

31

42

 

En este sentido, pese a que se puede observar un incremento importante del número de investigadores en este sistema, los requerimientos institucionales son aún mayores. A fin de que algunos de los programas del posgrado puedan mantener su registro, o aspirar a él, en el catálogo de Programas de Excelencia del CONACyT, se requiere, entre otras cosas, incrementar el número de investigadores en dicho sistema.

En cuanto a los programas de cooperación en redes, la UAQ ha emprendido esta acción con otras instituciones académicas, principalmente de la región circunvecina. Ejemplos de estas redes son: la Red Región, que consiste en un directorio de investigadores en Ciencias Sociales de los estados de Aguascalientes, Coahuila, Guanajuato, Michoacán, Querétaro, San Luis Potosí y Zacatecas; el Programa de Posgrado en Alimentos del Centro de México (PROPAC), que reúne a especialistas de Guanajuato, Querétaro y San Luis Potosí; la Red Regional en Recursos Bióticos, que concentra los esfuerzos de las universidades públicas de Querétaro, Puebla, Michoacán, Guerrero, Tlaxcala, Hidalgo, México y Morelos, a través de cuatro proyectos: doctorado en recursos bióticos, movilidad académica, laboratorios regionales de investigación y difusión sobre el uso, conservación y aprovechamiento de los recursos bióticos del centro de México.

En otros esfuerzos, en el ámbito regional, los investigadores de la UAQ se han vinculado con los de otras universidades, principalmente de Guanajuato, San Luis Potosí y Aguascalientes, para llevar a cabo proyectos específicos de investigación. Estas colaboraciones han sido facilitadas por el Sistema Regional de Investigación Miguel Hidalgo del CONACYT (SIHGO - CONACyT).

En la UAQ, algunos grupos de trabajo de tipo multidisciplinario han surgido en respuesta a necesidades específicas de investigación y vinculación; uno de ellos está en proceso de consolidación y reúne profesores de las Facultades de Ciencias Naturales, Ingeniería, Química, Psicología y Antropología, relacionados con el manejo integrado de cuencas hidrográficas. Pareciera que la organización interdisciplinaria o multidisciplinaria está en buena medida auspiciada por proyectos financiados que requieren de una visión integral y no disciplinar para su abordaje.

El financiamiento de proyectos de investigación se mantiene constante, pero no se ha logrado incrementar; posiblemente está asociado a que no hay nuevos cuerpos académicos compitiendo por los fondos. Los mismos cuerpos académicos no se han incrementado, como se muestra en el siguiente cuadro, tanto por agencias de investigación nacionales como CONACyT, y CONACyT regional a través del Sistema Regional de Investigación Miguel Hidalgo (SIHGO) y del CONCyTEQ, como también de financiamiento privado.

 

CUADRO Nº 14

Financiamiento recibido por la UAQ por proyectos de investigación1996-2000

Fuente

Montos

1996

Montos

1997

Montos

1998

Montos

1999

Montos

2000

CONACyT—Nacional

5

959,691

8

2’749,747

4

1’980,522

6

4’073,902

3

 1’608,609

CONACyT—SIHGO

7

2’462,352

7

1’905,845

15

4’265,420

6

2’467,120

8

 2’283,540

CONCyTEQ

*

154,209

*

121,998

4

279,347

12

1’720,700

9

 2’086,823

Total

 

3’576,252

 

4’777,590

 

6’525,289

 

8’261,722

 

 5‘978,972

*NOTA: No se cuenta con la información sobre el número total de proyectos aprobados.

 

Con ello, la UAQ refrenda su liderazgo en materia de investigación, y mantiene su compromiso de seguir impulsando esta importante labor. La cobertura en investigación en el estado abarca a los municipios de Querétaro, Corregidora, Amealco, San Juan del Río, El Marqués, Tequisquiapan, San Joaquín y Peñamiller. Pese a las limitaciones financieras, la investigación sigue siendo una prioridad institucional.

En cuanto a los programas de posgrado en la UAQ, estos tienen su origen a mediados de la década de los setenta. Uno de los programas, que a la fecha tiene un grado de consolidación importante, es el de Ciencia y Tecnología de Alimentos, fundado en 1975. Posteriormente, este programa, propicia la creación del Programa de Posgrado en Alimentos del Centro de la República (PROPAC), en 1989.

En 1976, la Facultad de Psicología da origen a la maestría en Psicología Clínica. En 1981 nacen en la Facultad de Ingeniería los estudios de posgrado, con la Maestría en Hidráulica, y un año después se crean las maestrías en Mecánica de Suelos y Construcción.

A partir de estas fechas ha surgido un número considerable de posgrados que han permitido dar mayor solidez a la Universidad. Hasta el momento se cuenta con 53 programas de posgrado, distribuidos de la siguiente manera:

 

CUADRO Nº 15

Evolución de los programas de posgrado 1996-2000*

Año

Especialidad

Maestría

Doctorado

1996

18

24

2

1997

20

25

3

1998

23

26

3

1999

24

26

3

2000

24

26

3

Nota: En este cuadro se incluyen líneas terminales

 

Una fortaleza es que en la Universidad haya crecido el nivel de posgrado, como respuesta a las demandas educativas de la sociedad queretana y de la región.

La estrategia de la Universidad para la consolidación de sus programas de posgrado y la inclusión de éstos en el Padrón de Excelencia del CONACyT ha cambiado a través del tiempo. En 1996 se contaba con el registro de tres programas en este padrón: el doctorado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos, la maestría en Ciencia y Tecnología de los Alimentos y la maestría en Análisis Político. Más tarde, en 1997, se integran el doctorado en Ingeniería, la maestría en Ingeniería (con línea terminal en Hidráulica) y la maestría en Instrumentación y Control Automático. En el año 2000, por el cambio de políticas del CONACyT, así como por limitaciones institucionales en el desempeño de algunos programas de posgrado, salen cuatro de nuestros programas del Padrón y quedan únicamente el doctorado y la maestría en Ciencia y Tecnología de los Alimentos.

Teóricamente, pertenecer al Padrón de Excelencia correspondería a una de las fortalezas institucionales. En este caso, nos ubicaríamos con mayores debilidades que fortalezas, puesto que en este momento sólo tenemos dos programas en este rubro. Sin embargo, dentro de los objetivos institucionales, no es prioridad la existencia de todos sus programas dentro de tal criterio, como lo marca el CONACYT, sino también dentro del campo de la profesionalización. Una de las estrategias a seguir para la consolidación de los posgrados será propiciar la evaluación curricular.

Es fuerte debilidad, la insuficiencia de datos estadísticos sobre la eficiencia terminal del posgrado.

Una gran fortaleza es que el posgrado este ligado con la investigación institucional, lo que permite que investigadores refuercen la docencia y los estudiantes de posgrado participen activamente.

Lo anterior nos obliga a hacer un replanteamiento en la definición de nuestros programas, entre los cuales está la revisión curricular de cada uno de estos programas para su inclusión o no en el Padrón de Excelencia, así como allegarse de fuentes de financiamiento para consolidar su infraestructura. Por otro lado, es importante consolidar los Cuerpos Académicos, y el desarrollo de estrategias adicionales, para lograr la incorporación de nuestros programas que tengan por finalidad la generación y aplicación del conocimiento y la formación de investigadores.

3.2.1.5 Extensión, difusión y servicio

Una de las tareas más relevantes que no ha tenido el suficiente impulso en la Universidad, a pesar de ser una de las funciones sustantivas, es la extensión. A través de ésta se establece la vinculación con los sectores social y productivo, con el propósito de identificar sus necesidades, lo que nos permite orientar, realimentar y enriquecer las funciones sustantivas de la Universidad, así como ampliar nuestra capacidad para incrementar los recursos propios.

A través de la extensión se realiza el servicio social, a partir del cual se atienden comunidades rurales y urbanas de población marginadas, así como sectores productivos y dependencias del sector público municipal, estatal y federal, utilizando como mecanismo la concertación de acciones, los programas específicos de colaboración y los convenios institucionales. En el siguiente cuadro se muestra la cobertura de este rubro:

 

CUADRO Nº  16

Sectores públicos beneficiarios del Servicio Social

Sector

Clave

Número de Alumnos (2000)

U.A.Q.

01

389

Gobierno Federal

02

79

Gobierno Estatal

03

67

Presidencia Municipal

04

126

Instituciones de Salud

05

163

Instituciones Educativas

06

10

Asociaciones Civiles

07

11

Organismos Independientes

08

19

Total

 

864

 

Como se puede observar, la Universidad concentra la mayor parte de alumnos que prestan el servicio social. Pese a que estén vinculados a programas relacionados con servicios comunitarios y de apoyo a la investigación que realizan los docentes de nuestra institución, en otros casos, realizan actividades meramente administrativas. En este sentido, es importante reconsiderar las actividades del servicio social al interior de la Universidad, porque si bien apoyan programas académicos, su función es tener mayor presencia en el exterior, tanto en la relación de los estudiantes con la problemática profesional de su competencia, como en la atención de la demanda del servicio a los diferentes sectores sociales, particularmente los mayoritarios.

El nivel de concentración de los beneficiarios de este programa también se percibe a nivel geográfico. En el siguiente cuadro se muestra que el municipio de Querétaro es el principal beneficiario, dado que capta 88.80% de los practicantes. Sin duda, esto reduce la presencia de la UAQ en las comunidades y municipios donde la demanda es mayor y las oportunidades para incidir en las problemáticas relacionadas con el combate a la extrema pobreza es relevante.

 

CUADRO Nº 17

Cobertura

N° de alumnos (2000)

%

Querétaro

704

88.80

San Juan del Río

73

9.20

Guanajuato

16

2.00

Total

793

100.00

 

Las diferentes Facultades de la Universidad, igualmente, adoptan y desarrollan programas que se inscriben en el renglón de servicio social.

La extensión universitaria, racionada con el servicio social comunitario tiene sus antecedentes en la creación de la Central de Servicios a la Comunidad (CESECO), por parte de la Facultad de Psicología en 1978. Actualmente cuenta con las CESECO Centro, Lomas I, Lomas II y Santa Bárbara. Estas centrales han tenido, fundamentalmente, dos propósitos: tener espacios de prácticas para la formación de estudiantes de las distintas áreas; y ofrecer servicios psicológicos a la comunidad de escasos recursos. El incremento de la demanda de los servicios, el aumento de los programas de servicio y del número de estudiantes que se incorpora a ellos, obliga a proyectar estas centrales previendo espacios, materiales y equipos adecuados para atender eficazmente a los usuarios.

La Facultad de Ingeniería cuenta con un programa orientado a la asistencia de agricultores de bajos recursos. Dentro de este programa se ha apoyado a productores del municipio de Cadereyta desarrollando invernaderos que pueden utilizar a bajo costo.

La Facultad de Ciencias Naturales desarrolla programas de educación ambiental y de conservación de recursos naturales como parte de sus servicios a la comunidad. Además, ha creado el Centro de Capacitación Rural, en Amazcala, para asistir a productores de acuerdo con un programa de entrenamiento.

En la Facultad de Enfermería se desarrollan programas de servicio a través de la Unidad Multidisciplinaria de Servicios a la Comunidad, especialmente dirigido a la educación para la salud y con atención a diversos grupos sociales. Recientemente se han incorporado otras Facultades. Mientras que la Facultad de Derecho dispone del Bufete Jurídico Gratuito, actualmente en Querétaro, San Juan del Río y Tequisquiapan. El Bufete de Cooperativismo dedica sus esfuerzos a asesorar y apoyar la organización de sectores cooperativos de la población que lo demanda.

Pese a la existencia de diversos programas de servicio que ofrecen la diferentes Facultades, es necesario redefinir una política de extensión que permita la articulación de programas, recursos y materiales, de tal manera que exista una coordinación institucional que favorezca el trabajo interdisciplinario.

Además de estos programas de servicio social, existe el Sistema Universitario para el Bienestar Social (SUBS), que cuenta con tres unidades distribuidas de la siguiente manera: una, en la Colonia Santa Bárbara del Municipio de Corregidora, la cual tiene una cobertura aproximada de 40,000 personas; otra, en la Delegación de Santa Rosa Jáuregui, municipio de Querétaro, la cual tiene una cobertura cercana a los 40,000 habitantes; y la tercera es la Unidad Odontológica, ubicada en la calle de Corregidora, Centro Histórico del municipio de Querétaro. Los servicios que ofrecen son los de medicina general, algunas especialidades, odontología, asistencia psicológica, jurídicos, farmacia y servicios veterinarios.

La firma de convenios con diferentes municipios está facilitando la incorporación de demandas educativas que la Universidad podría ofrecer. Además, se está presentando otro tipo de apoyo en materia de investigación y extensión. Por el momento, no disponemos de mecanismos institucionales para que la diversidad y la cantidad de demandas que real y potencialmente se presenten puedan tener respuestas eficientes; si no lo resolvemos rápidamente, podríamos generar frustración en las expectativas educativas y de servicio y podría convertirse en un problema de confianza de los sectores sociales hacia la Universidad.

La Universidad Autónoma de Querétaro dispone del Programa Bolsa de Trabajo para favorecer la colocación laboral de sus egresados; sin embargo, se incluye todo egresado de cualquier institución educativa. En el año 2000, hubo 1,059 solicitantes beneficiados.

Este programa requiere de sistematización para poder ser un adecuado mecanismo de promoción de nuestros egresados, facilitar información sobre necesidades más específicas de las empresas de la región y ayudar a diseñar programas de capacitación y de asesoría a la luz de este mecanismo de realimentación.

El Programa de Prácticas Profesionales coadyuva para que nuestros egresados complementen su formación práctica, faciliten su incorporación al mercado ocupacional y experimenten las necesidades concretas que deben satisfacer para el buen desempeño profesional. Varias Facultades lo han incorporado como materia para su acreditación.

 

CUADRO N° 18

Prácticas Profesionales

N° Empresas beneficiadas

N° Alumnos colocados

62

81

Nota: Los datos abarcan hasta el mes de septiembre de 2000.

 

El Programa de Seguimiento de Egresados está conformado por varias acciones que buscan, en su conjunto, identificar la necesidad de habilidades y conocimiento que van requiriendo nuestros egresados, con la finalidad de diseñar programas de educación continua y dotar de información a la Escuela de Bachilleres y las Facultades de la UAQ sobre el tipo de entrenamiento y habilidades necesarias para lograr esos perfiles de egreso. Hasta ahora sólo se cuenta con un banco de datos creado a través de diversas encuestas realizadas. Es necesario su procesamiento, y análisis, y derivar de ello las líneas generales de acción.

Desde hace 16 años se viene realizando un programa importante de divulgación científica denominado Viernes y Sábados en la Ciencia. Este ha sido apoyado por la Academia Mexicana de Ciencias y en él han participado prominentes científicos, conocedores profundos en cada una de sus áreas; son los estudiantes del nivel medio superior los principales beneficiarios. Este programa consiste en ciclos de conferencias con los temas más diversos y de actualidad donde se presentan tópicos relacionados con el desarrollo científico. El siguiente cuadro muestra la magnitud de la cobertura de 1994 a 2000.

 

CUADRO Nº 19

Cobertura del Programa Viernes y Sábados en la Ciencia

Año

1994

1995

1996

1997

1998

1999

2000

Número de asistentes

4,200

4,900

2,900

2,700

3,400

4,000

5,100

 

En el año 2000 se realizaron programas que buscaron fomentar la cultura de la indagación y de la ciencia entre nuestros estudiantes y la comunidad en general, subrayando que, por primera vez y con el apoyo del CONCyTEQ, se realizó el primer Taller de la Cien cia dirigido para niños.

 

CUADRO Nº 20

Programas de divulgación científica

Programa

Institución Participante

N°. de conferencistas

N°. de asistentes*

Lugar

Sábados en la Ciencia

Academia de la Investigación Científica  

34

4000

Preparatoria Sur, Preparatoria Norte y Campus San Juan del Río

Domingos en la Ciencia

UAQ

11

1100

Estados de la República Mexicana

Cursos a la Comunidad

UAQ

29

488

Escuela y Facultades de la UAQ

Taller de Verano de Divulgación Científica para niños

UAQ

14

120

Centro Universitario

*Nota: Para el año 2000 se ha incrementó el número de asistentes a los diferentes programas a 5,746.

 

Los municipios de Querétaro y Tequisquiapan han sido los principales beneficiarios de estos programas, por lo que es necesario ampliar la cobertura geográfica y nuestra presencia en más instituciones de educación media superior pública y privada. Se aprovechan las invitaciones que diferentes instituciones y Gobiernos nos vienen realizando para que la UAQ esté presente en exposiciones y ferias. Con pocos materiales, aún con falta de recursos económicos, hemos invitado a varias Facultades para que exhiban diferentes productos y difundan diversos servicios.

En materia de extensión académica, las Facultades han tenido una importante producción en cursos, talleres, diplomados, conferencias y congresos, que han sido adecuados para mostrar la producción de nuestros investigadores, y a la vez para la formación de nuevos cuadros en este rubro y para la capacitación.

En el año 2000 se impartieron un total de 126 cursos en la Escuela de Bachilleres y las Facultades, relacionados con las áreas de Ciencias Naturales, Medicina, Ingeniería, Contaduría y Administración, Ciencias Políticas, Enfermería, Informática, Psicología, Derecho, Filosofía, Química. Los cursos fueron sobre asistencia técnica, actualización, trasferencia de tecnología, capacitación tecnológica y formación docente.

Los principales beneficiarios de estos curso fueron el INEGI, el Colegio de Médicos Veterinarios, la Universidad de Puebla, el CENEVAL; los Hospitales Generales de Huichapan e Ixmiquilpan, Hgo., y Cadereyta, Qro; instituciones de educación superior del estado e internacionales y el Grupo de Productores.

Los ingresos generados por estos cursos han sido muy importantes. Por ejemplo, se destacan los de la Facultad de Informática, $706,955 y los de la Facultad de Contaduría y Administración, $313,000.

Se realizaron 8 talleres de capacitación en las áreas de enfermería, jurídica informática y psicología. Se instrumentaron 21 diplomados, en las áreas de contaduría, administración de recursos humanos, fiscales, política social, salud, sexualidad, historia, cultura y agrícola. En este renglón, importante para la actualización de recursos humanos en diferentes áreas, también identificamos su importancia económica, por ejemplo: los diplomados de la Facultad de Contaduría, que fueron 5 en total, dieron un ingreso de $1'436,500.

El de la Universidad ha sido un ámbito privilegiado de la critica y reflexión sobre los grandes problemas regionales. Es sumamente importante por que permite el concurso de diversos actores e instituciones en un diálogo directo y objetivo, con la ayuda de la visión científica, para identificar problemas y localizar rutas de solución. Es, a nuestro parecer, una de los espacios más dinámicos que permite la vinculación entre las necesidades y expectativas de los grupos sociales con nuestra institución.

En este periodo se realizaron 30 foros, con temáticas referidas a campañas políticas, el papel de la mujer, problemáticas socio-económicas nacionales, situación de la investigación científica y problemas antropológicos, problemática juvenil (sexualidad, adicciones y familia), problemas agrícolas y aspectos culturales.

Se efectuaron 185 conferencias en la Escuela de Bachilleres (planteles norte y sur), Derecho, Lenguas y Letras, en las Facultades de Ciencias Políticas y Sociales, Derecho, Informática, Lenguas y Letras, Filosofía y Química.

Nuestros profesores e investigadores participaron en 32 congresos estatales, nacionales e internacionales sobresaliendo las Facultades de Ciencias Políticas y Sociales, Derecho, Informática, Lenguas y Letras, Filosofía, Química, Ciencias Naturales. Esta actividad está teniendo problemas de fomento debido a que la falta de recursos hace que pocos investigadores puedan asistir a estos congresos o que reduzcan su participación.

La Preparatoria Abierta es un servicio que nuestra Universidad está ofreciendo desde 1982 apoyándose en practicantes de servicio social. La creciente demanda ha obligado a utilizar espacios del Plantel Sur de la Escuela de Bachilleres. Sin embargo, nuestra capacidad ha sido insuficiente para responder a toda la demanda y se requiere de la profesionalización de sus profesores. Actualmente se atiende a 300 personas por trimestre. Varios municipios han solicitado este servicio. Igualmente innumerables empresas ubicadas en el corredor industrial nos han solicitado servicios de capacitación para sus trabajadores.

La institución cuenta, en materia de difusión, con la estación de Radio Universidad desde hace 21 años en las frecuencias de AM 850 y FM 90.5. El número de programas es de 110 y se dividen en científicos, musicales, informativos en general y de información especializada. Además de promocionar las actividades y resultados del quehacer universitario, así como de ser un espacio para profundizar y reflexionar sobre las problemáticas social, económica y política del entorno inmediato, nacional e internacional, se proporciona información diversa a la población radioescucha. El número de horas al aire es de 18. Sin embargo su cobertura está limitada a la ciudad de Querétaro, lo que nos imposibilita tener cobertura a lo largo del estado y la región. Por otro lado, este recurso no ha sido suficientemente explotado por las diversas dependencias de la Universidad.

A pesar de las limitaciones financieras, la producción editorial universitaria produjo en el año 2000: 9 libros, 7 publicaciones periódicas y 2 discos compactos, con un tiraje total de 17,400 ejemplares, además del material didáctico editado por la Escuela de Bachilleres. Existe, en proceso de edición, 22 libros a cargo de la Dirección de Medios, y a partir del segundo semestre de 2001, contamos con un fondo editorial equivalente a $500,000 MN, para apoyar el trabajo editorial universitario, además de las fuentes alternas de financiamiento que se pactan con otras instituciones en la modalidad de coedición.

La Librería Universitaria, prácticamente en quiebra y cerrada, fue reactivada a través de acciones que permitieron sanearla y enfrentar el déficit de casi medio millón de pesos. Con finanzas sanas en este momento se ha demostrado que con una política más racional, la librería otorga un mejor servicio y dispone de ingresos extraordinarios.

En el año 2000 se vendieron 5,182 volúmenes. En este momento se dispone de 12,483 volúmenes y para aumentar el servicio se realizaron convenios con hasta 71 casas editoriales. Para la organización de la información se adquirió un Server. Se dispone ya de una librería en Tequisquiapan; sin embargo, necesitamos modernizar el servicio para que pueda atender eficientemente a las necesidades de investigadores y estudiantes.

En el rubro de bibliotecas, se cuenta con 100,528 registros catalográficos. A la fecha hay 138,509 copias, que conforma el catálogo bibliohemerográfico, el cual es consultado en las bibliotecas departamentales, en equipos locales y por medio de la Red Institucional. En este período se adquirieron 21,821 libros con recursos propios y en proyectos por concurso (FOMES y PROMEP), asimismo se recibió para la Facultad de Contaduría y Administración la donación del acervo de la Biblioteca Institucional de Nacional Financiera con 17,000 libros y 700 títulos de publicaciones periódicas no vigentes.

Actualmente se cuenta con 441 títulos de publicaciones periódicas que se presentan en la página Web de la institución, y 60 bases de datos multidisciplinarios disponibles para su uso. La consulta por medio de Internet a las bases de datos EBSCO HOST ha estado creciendo. En el periodo de agosto a noviembre del 2000, hubo alrededor de 27 millones de datos consultados.

Se cuenta con Internet para la obtención de documentos originales, lo cual refleja el avance que se ha tenido para que el usuario obtenga el recurso documental para su formación.

En materia deportiva, se impulsa la participación estudiantil en diferentes torneos y en diversas especialidades, a escala estatal y nacional. Para apoyar esta actividad de manera más ordenada, la Secretaría de Extensión ha impulsado la creación de las Academias de Fútbol y Natación, y están en proyecto las de Ajedrez, Básquetbol y Tenis; éstas buscan, además, constituirse en unidades autofinanciables. La Copa Alejandrina, es un reconocimiento a los estudiantes más destacados en la práctica del deporte. Se han creado los Cursos infantiles de verano en 8 disciplinas, con la finalidad de extender los servicios deportivos a la población en general. Sin embargo, la falta de recursos económicos dificulta la consolidación de varios programas, sobre todo, en cuanto a la profesionalización de nuestros entrenadores.

Para fortalecer esta actividad se ha convenido con el club Pumas de la UNAM para apoyar y asesorar las actividades deportivas de nuestra institución.

Dos óbices de la actividad de extensión que podríamos apuntar serían: la limitada capacitación del personal dedicado a esta función, lo que dificulta la profesionalización y el carecer de reconocimiento académico en varias Facultades. Esa falta de reconocimiento también impacta en la escasez de recursos económicos dirigidos a esa actividad. En todo caso, se desea que la actividad de extensión se constituya en un campo donde se desarrollen actividades para obtener mayores ingresos. Esto, por supuesto, obliga a reconsiderar la función de extensión.

Por otro lado, a pesar de que algunas Facultades llegan a desarrollar amplias actividades de extensión y, en ciertos casos, con propósitos de formación de los estudiantes, se presenta escasa vinculación con la docencia y especialmente con la investigación, lo que dificulta que extensión pueda tener un mayor impacto en las otras dos áreas sustantivas de la Universidad.

Hasta ahora, ha sido difícil contar con un sistema de evaluación que permita reconocer las dificultades y los niveles de impacto en las actividades de extensión que se vienen realizando. Cada dependencia, a su manera, tiene diversas formas de evaluar. Esto, por supuesto, dificulta identificar los problemas que habría que enfrentar para mejorar los procesos y los servicios.

3.2.2 Área Adjetiva

La administración universitaria, como función de apoyo para el mejor desempeño de la docencia, la investigación y la extensión, así como para lograr una atención eficiente y oportuna a los estudiantes, requiere de una reestructuración del personal administrativo, de los procedimientos y funciones, de manera tal que no solo reduzcan aún más los gastos de operación, sino que se racionalicen y se mejore la eficiencia en el uso de los recursos. En este sentido, debe hacerse una revisión de las condiciones en que se encuentra el desempeño y distribución del personal administrativo, así como del equipo y materiales, tanto en el área central como en la Escuela de Bachilleres y las Facultades.

Otro aspecto que requiere nuestra atención es la generación y sistematización de la información administrativa. Debe agilizarse y ordenarse el manejo y fluidez de la información, tanto para uso interno como para reportes ante las dependencias federal y estatal. Para ello es necesario avanzar en la conclusión de los trabajos del Sistema Integral de Información Administrativa (SIIA), que están siendo apoyados por el Programa Nacional de Normalización Administrativa (PRONAD).

El desarrollo de la infraestructura informática, permitirá hacer un manejo ágil y ordenado de la información de los subsistemas administrativo-contable, de recursos humanos y de control escolar. De esta manera, el trabajo de planeación contará con los insumos necesarios y confiables para la toma de decisiones. Además de ello, se podrá contar con las mejores condiciones para brindar mayor atención a los estudiantes y profesores en la consulta oportuna que requieran y para realizar los trámites correspondientes.

3.2.2.1. Personal administrativo

Conforme al histórico del comportamiento del personal administrativo, en el que se muestra una tendencia al crecimiento, se ve la necesidad de hacer una reestructuración administrativa que permita racionalizar y optimizar el uso de los recursos, así como de revisar los perfiles de puestos y las funciones. En este sentido, es necesario rediseñar el manual administrativo con la finalidad de reducir los gastos de operación y eficientar el desempeño de los recursos humanos.

El total del personal administrativo, hasta la nómina del mes de septiembre de 2000, en su clasificación de trabajadores administrativos y manuales (personal operativo), personal de confianza y directivos, es de 957. A continuación se muestra el histórico de crecimiento del personal administrativo:

 

CUADRO Nº 21

Personal

administrativo

1992-93

1993-94

1994-95

1995-96

1996-97

1997-98

1998-99

1999-00

2000-01

Personal operativo

702

744

769

780

766

774

736

719

800

Personal de confianza y directivos

99

104

128

143

162

171

182

190

157*

Total

801

848

897

923

928

945

918

909

957

 

Notas:    No se incluyen jubilados, pensionados y por honorarios.

El incremento del personal administrativo que se observa en el año 2000 es consecuencia de la regularización del año anterior.  

*No se consideran 45 docentes que desempeñan funciones administrativas.

3.2.2.2 Apoyo académico

 

Un rubro importante de los servicios administrativos es el apoyo académico a estudiantes, profesores e investigadores, por lo que la infraestructura de equipo y materiales debe estar, no sólo en constante actualización y mantenimiento, sino también en incremento, conforme al crecimiento de la demanda que presentan los programas académicos.  

CUADRO Nº 22

Apoyo académico

Tipo

Número

Alumnos por computadora

13.8

Volúmenes adquiridos

9,911

Volúmenes por alumno

8.65

Número de suscripciones

453

Acciones de mejora al sistema bibliotecario

12

 

3.2.2.3 Apoyo administrativo

Número de alumnos, académicos, administrativos y directivos por Unidad Académica.

 

CUADRO Nº 23

Unidad Académica

Alumnos

Académicos

Administrativos*

Directivos**

Bachilleres

5,197

213

107

1

Bellas Artes

935

81

21

1

Ciencias Naturales

505

79

27

1

Ciencias Políticas

397

47

20

1

Contaduría y Admón.

2,475

202

46

1

Derecho

1,533

104

26

1

Enfermería

477

44

17

1

Filosofía

203

48

16

1

Informática

653

38

17

1

Ingeniería

878

186

62

1

Lenguas y Letras

1,445

46

22

1

Medicina

591

116

31

1

Psicología

763

125

31

1

Química

479

85

34

1

Total

16,531

1,414

477

14

 

   Notas: 19 docentes más en Extensión Universitaria (1,433 en total).

* No incluye al personal de la Administración Central, ni a ex-funcionarios que están en proceso de liquidación relativa a la función desempeñada (479 en total).

** De los 14 Directivos, 13 ya fueron reportados como docentes de Tiempo Completo.

En el cuadro no se incluye al personal jubilado, pensionado ni por honorarios.

 

3.2.2.4 Financiamiento

Está visto que la educación es la inversión más segura que un país puede hacer para dignificar la vida y para el desarrollo sustentable de sus habitantes. Sin ella, la miseria y desesperanza se agudizan condenando a los pueblos a la dependencia y subordinación de otros. Como derecho universal de los ciudadanos, sin distinción de condición social, raza, edad, sexo o creencia religiosa, es responsabilidad del estado procurarla.

En el caso de la educación superior no existe ningún país desarrollado con una Universidad subdesarrollada. Desde sus orígenes, y aún más en la época actual, estas instituciones han constituido el espacio estratégico para el desarrollo de los pueblos civilizados. En todo el mundo la educación superior, y la investigación que en ella se realiza, está financiada fundamentalmente por el estado, respetando la libertad académica.

La educación pública superior, erróneamente apreciada por algunos como un gasto, es la inversión más rentable que un país pueda hacer para su futuro en los inicios del Siglo XXI. A las universidades públicas no puede retirárseles el apoyo justamente cuando éste se vuelve más necesario. La inversión de casi un siglo que el país ha realizado en estas instituciones, al retraerse, podría aniquilarlas en el corto plazo y condenan al país al atraso y a la dependencia irreparable.

Indudablemente que se debe aprovechar este patrimonio invaluable y fortalecer la educación pública universitaria; sin embargo, ello requiere de reformas profundas, tanto en la enseñanza y la organización académica y administrativa como en la asignación del financiamiento. Es preciso crear las condiciones que permitan a la Universidad pública atender, con calidad, la cobertura educativa y la diversificación de su oferta, en correspondencia con las demandas sociales y el desarrollo del conocimiento científico, humanístico y tecnológico.

Una de las principales preocupaciones de la comunidad de la UAQ es la situación financiera. Los fuertes pasivos que enfrenta la institución constituyen un gran obstáculo para el desarrollo de los programas académicos y para responder a la demanda educativa actual y potencial en la entidad. Esta es una de las razones que motivan a la comunidad universitaria a reflexionar la viabilidad no sólo del modelo académico-administrativo que nos rige, sino también de las políticas presupuestales federales y estatales que en gran medida nos han conducido a esta situación deficitaria.

3.2.2.4.1 El déficit financiero en la UAQ

La Universidad Autónoma de Querétaro ha sido, durante muchos años, la principal alternativa de educación media superior y superior en el estado que ha atendido las necesidades del sector público, privado y social, lo cual la compromete cotidianamente a enfrentar con éxito los retos de la modernidad a través de una mejora en la calidad de sus programas y de eficiencia en el ejercicio de sus recursos, así como de elevar la oferta educativa para atender responsablemente el desarrollo del estado y de la región. Ello, sin duda, ha llevado consigo un crecimiento significativo en infraestructura y recursos humanos en los últimos veinte años, por lo que, ante las crisis económicas recurrentes en las últimas dos décadas, la UAQ se ha visto inmersa en desajustes presupuestales, situación que ha propiciado en gran medida el problema financiero. Algunas de las circunstancias que han propiciado este déficit financiero son atribuibles a los factores siguientes:

  • El reconocimiento de la SEP de sólo 51.20% de las prestaciones contenidas en los Contratos Colectivos de Trabajo, de acuerdo al estudio actuarial con datos a diciembre de 1996.

  • La ausencia de un fondo de jubilación, repercute en el gasto de operación, que en estos momentos debería de ser del orden de $1'150,378, según estados financieros al 31 de diciembre de 2000. 

  • El no-reconocimiento de plazas administrativas por parte de la SEP, desde el año de 1989. 

  • El no-reconocimiento, para efectos de subsidios, de los nuevos programas académicos en licenciaturas y posgrados que ofrece la Universidad, como Biología, Nutrición, Cooperativismo, Periodismo, Administración Pública, Odontología, Sistemas, Educación Física, por mencionar algunos, y que han requerido de infraestructura en nuevos espacios, equipos, laboratorios, bibliotecas, personal y mantenimiento. 

  • Los subsidios al ISR e IMSS contemplados en los Contratos Colectivos de Trabajo y que se vean reflejados en las finanzas de la Universidad. 

  • La ausencia de un programa de reordenación administrativa que permita optimizar nuestros procesos y, por ende, asegurar un mejor aprovechamiento de nuestros recursos financieros.

Lo antes descrito nos ha conducido a situaciones extremas como lo muestran los estado financieros del 1° de enero al 31 de diciembre de 2000, según lo indican los cuadros siguientes:

 

CUADRO Nº 24

INGRESOS ACUMULADOS

Fuente de financiamiento

Ordinario

Extraordinario

Específico

Subsidio federal

276’465,598.00

 

9’530,885.00

Subsidio estatal

120’000,000.00

23’341,000.00

3’358,200.00

Ingresos propios

69’525,887.49

 

 

Total de ingresos

465’991,485.49

23’341,000.00

12’889,085.00

 

EGRESOS

Concepto

Monto acumulado

Remuneraciones

191’133,778.60

Prestaciones directas

227’992,784.25

Prestaciones indirectas

24’272,230.35

Estímulos institucionales

17’697,502.68

Suma de remuneraciones y prestaciones

461’096,295.88

Gastos de operación:

Servicios

29’088,444.60

Artículos y materiales de consumo

6’348,290.30

Conservación y mantenimiento

9’451,755.68

Otros gastos

2’791,320.75

Adquisiciones de mobiliario y equipo

8’084,396.04

Edificios y terrenos

595,777.29

Suma de gastos de operación

56’359,984.66

Suma de gastos presupuestados

517’456,280.54

Superávit (déficit) de operación

(15’234,710.05)

Suma de actualizaciones y recargos

68’148,584.90

   

Concepto

Monto acumulado

Total de egresos

585’604,865.44

Resultados del ejercicio (déficit)

(83’383,294.95)

Estimación Jubilación y Finiquitos

190’571,912.00

 

FONDOS FEDERALES POR CONCURSO*

Tipo

Monto asignado

 

Pesos

Dólares

Apoyos PROMEP  (becas y apoyos a profesores con perfil)

5’022,113.00

571,705.00

Proyectos FOMES

35’993,600.00

0

Proyectos PROADU

322,230.00

0

Total

41’337,943.00

571,705.00

* Nota: Los montos de Apoyos PROMEP corresponden a 1999-2000, el monto de los recursos FOMES son para su ejercicio en el 2001, en tanto que PROADU es para el año 2000.  

3.2.3 Área Regulativa

3.2.3.1 Legislación

La más reciente Ley Orgánica de la UAQ fue expedida por el Congreso Local el 30 de diciembre de 1985; desde esa fecha no ha sufrido modificaciones. Las nuevas necesidades académicas, organizativas y administrativas están demandando su revisión. La legislación actual representa, más que un instrumento regulador y facilitador, un obstáculo para el desarrollo organizativo y académico. Se requiere de su actualización y modernización para responder a los nuevos retos educativos del siglo XXI.

La posibilidad para transitar a modelos de mayor flexibilidad, que favorezcan la mejora de la calidad, ampliación de la cobertura y diversificación educativa, se ven limitadas por las disposiciones normativas que están diseñadas conforme al modelo de Escuela y Facultades. En este sentido, algunos programas académicos de la UAQ que han implementado otras modalidades como el sistema de créditos, enfoques modulares y esquemas de trabajo interdisciplinario (entre dependencias e instituciones), así como el impulso de la movilidad de estudiantes y profesores, y su respectiva certificación y reconocimiento, se ven limitados para operar bajo la normatividad vigente, situación que no favorece la implementación de modalidades abiertas y a distancia.

Esto se ha solucionado mediante algunas adiciones hechas al Estatuto Orgánico que, a propuesta de la Escuela de Bachilleres y las Facultades, han contado con la aprobación del H. Consejo Universitario; sin embargo, el problema no quedará resuelto sino hasta que sea reformada la legislación universitaria en conformidad con los nuevos requerimientos académicos y organizativos.

Se requiere una revisión profunda y sistemática del marco normativo para que responda a los rápidos procesos de cambio que requieren los quehaceres universitarios, tanto en su interior, como en su relación con los ámbitos estatal, nacional e internacional.

3.3 Retos de la Universidad Autónoma de Querétaro

3.3.1 El primer gran reto de la Universidad es académico. Si la educación superior quiere ser realmente una palanca para el desarrollo social armónico, justo, democrático y centrado en el ser humano, es necesario que las ofertas educativas cumplan, por lo menos, tres requisitos: 1) Estar a la vanguardia del desarrollo del conocimiento humanístico, científico y técnico; 2) Atender a las demandas del mercado y por tanto que posibiliten a nuestros egresados un lugar en la estructura ocupacional; 3) El desempeño íntegro e irrenunciable de la función social que nos define como Universidad pública.

En este sentido, la Universidad debe crear un esquema de planeación que le permita, no solo mantener la matrícula de las profesiones tradicionales, sino, también, generar opciones educativas innovadoras, multidisciplinares y flexibles que lleguen a satisfacer las demandas de las regiones más pobres y alejadas del centro industrial de la entidad.

El crecimiento de la matrícula universitaria no debe ser entendido como una expansión de lo que hoy tenemos, sino como la ampliación de la cobertura y la diversificación de nuestra oferta educativa fuera del espacio geográfico del municipio de Querétaro, de tal manera que la población de la Sierra y la región del Semidesierto tengan posibilidades de acceso a la Universidad.

3.3.2 El segundo reto de nuestra Universidad es pensar en una institución con una reordenación administrativa y con clara vocación de servicio a la función sustantiva, de forma tal que los recursos humanos y financieros tengan su mayor aplicación al desarrollo de las funciones sustantivas.

La reorganización administrativa no sólo será un nuevo organigrama, sino que debe darse acorde con estructuras menos burocráticas relacionadas directamente con el cumplimiento de las funciones sustantivas, que permitan, además, construir comunidades participativas en términos de un aparato de gestión democrática para coordinar el conjunto de acciones realizadas por la Escuela de Bachilleres y las Facultades, para crear un canal adecuado de comunicación entre los universitarios y entre la Universidad y la sociedad.

3.3.3 El tercer reto exige reflexionar una nueva forma de organización académica. Es importante repensar y proponer opciones de organización académica que superen las debilidades del modelo de organización actual y permitan sus potencialidades.

La reforma requiere nuevas formas de enseñanza y aprendizaje. La revolución del conocimiento está impactando directamente el contenido, los métodos, los lenguajes y los instrumentos del quehacer académico en su conjunto; en este sentido, la reforma impacta también en el diseño, la construcción de los currículos y la fusión de ramas del saber. Lo anterior exige imaginar y definir nuevas estructuras académicas articuladas entre sí.

Estos cambios en las disciplinas y en los currículos deben ser el eje para adecuar las estructuras organizativa y administrativa hacia esquemas relacionados directamente con el cumplimiento de funciones sustantivas, que permitan, además, construir una comunidad participativa, fortalecer los cuerpos colegiados y sus formas de gobierno.

La organización curricular por créditos, las áreas de formación común entre diferentes carreras, las currículas flexibles, son sin duda la puerta para el desarrollo de nuevas ofertas educativas. En la medida en que la Escuela de Bachilleres y las Facultades trabajen conjuntamente tanto en el diseño de planes que favorezcan el trabajo interdisciplinario, y que sean comunes a las grandes áreas del conocimiento, como en la conformación de grupos de investigación y de docencia especializados por problemas de investigación, se constituirán en las corrientes de renovación de la estructura universitaria.

3.3.4 El cuarto gran reto es incrementar la presencia social de la Universidad. La extensión debe ser reconceptualizada para convertirse en un proceso educativo, cultural y científico que articule la enseñanza y la investigación de manera indisociable y que haga viable la relación Universidad-Sociedad, que permita a la comunidad académica un aprendizaje que, en la reflexión teórica, pueda enriquecer el conocimiento. La extensión constituye un intercambio sistematizado de saberes académicos y populares que trae como consecuencia la producción del conocimiento, fruto de la confrontación de la realidad.

La extensión constituye un espacio de formación con grandes posibilidades de desarrollo; potencialmente puede ser una dimensión articuladora entre la docencia y la investigación.

3.3.5 El quinto reto es construir un proyecto de Universidad respetando los procedimientos democráticos que hoy nos han permitido transitar a procesos más transparentes y participativos. No sólo es importante respetar la estructura y espíritu de los Consejos Académicos y el Consejo Universitario, como instancias de representación paritaria y órganos democráticos para la toma de decisiones, sino también enriquecerlos para el desempeño de sus funciones académicas, que hagan del ejercicio académico cotidiano un espacio real de discusión y formación.

3.3.6 El reto del problema financiero es sentar las bases para resolver el déficit que vive la Universidad.

La insuficiencia de recursos genera modificaciones en los programas académicos, en la infraestructura ocupacional, en el personal académico y administrativo, en el sistema en su conjunto desde la perspectiva del cumplimiento de sus funciones y en el plano de las expectativas sociales sobre la Universidad pública. Los fondos públicos son fundamentales para que la Universidad pueda cumplir con sus funciones económica, social y cultural.

La Universidad hará su mejor esfuerzo a fin de resolver sus problemas financieros, sin embargo, la magnitud de éstos exige la suma de voluntades de los actores universitarios y de los sectores social, público y privado.

3.4 Espíritu de la Reforma Universitaria

Ante estos retos fundamentales, la Reforma Universitaria se establece como la única vía para enfrentarlos de manera estructural y ofrecer alternativas viables para su solución.

La Reforma Universitaria no podrá ser el resultado de una propuesta unilateral de las autoridades, será el producto de una amplia discusión de la comunidad universitaria a través de los sectores, los órganos colegiados y del propio H. Consejo Universitario, aunado a una amplia consulta social, para la definición colectiva del nuevo modelo. Sabemos que toda reforma requiere de esfuerzos deliberados que establezcan la orientación y, sobre todo, que generen la fuerza necesaria para vencer las resistencias que, ante lo nuevo o de la defensa de intereses creados, se oponen a cualquier modificación del statu quo. Pero también sabemos que existen amplios sectores que ven en la reforma la posibilidad de fortalecer y ampliar la posición social de nuestra institución. Por este motivo, la construcción del proyecto de Universidad debe ser producto de un amplio y democrático debate, siempre orientado a la mejora de la calidad académica y la pertinencia de la organización administrativa y normativa que le dé soporte.

Durante las Jornadas Temáticas de los meses de octubre y noviembre de 1998, los distintos sectores universitarios detectaron una serie de problemáticas dignas de atención. Ejemplos de lo anterior son los señalamientos acerca de la desarticulación de las funciones sustantivas, la falta de trabajo colegiado (intra, inter, multi y transdisciplinario), así como una tendencia a la tecnologización y privatización de los servicios de la Universidad por encima de la formación humanística y ética. Asimismo, una constante de estos trabajos está referida al cuestionamiento del modelo actual de la Universidad, por lo cual se hace necesaria la reflexión de este tema central.

Las propuestas sugeridas en las Jornadas Temáticas de 1998, según el trabajo de recopilación y análisis, apuntan hacia una flexibilización curricular que permita la actualización de las prácticas educativas de la Universidad. Se manifiesta la necesidad de la planeación institucional en la articulación de las funciones sustantivas con el objetivo de recuperar su valor y de esta manera se constituyan en el eje de la actividad universitaria.

3.4.1 Estado del proceso de Reforma Universitaria

La Reforma Universitaria en la UAQ, como política institucional, se inició desde 1996 con la reflexión del marco legislativo de la institución y los efectos que las nuevas políticas y cambios globales podían tener sobre la pertinencia, cobertura y calidad de la educación pública superior en México.

En los meses de octubre y noviembre de 1998, se presenta una segunda etapa con la organización de las Jornadas Temáticas. Se cuenta con la participación amplia de la comunidad universitaria y de importantes sectores sociales del estado. En 1999, se realiza la modificación al Estatuto Orgánico en materia de procesos de elección de las autoridades universitarias, lo que favoreció un proceso de democratización en la elección de rector y directores.

En el 2000, después del cambio de administración central, inicia la tercera etapa del proceso de reforma, con la reactivación de los trabajos y la integración de nuevos representantes ante la Comisión para la Reforma Universitaria.

A mediados de este año, la Comisión elabora el denominado Documento Base, para sentar las bases que permitan orientar los trabajos para la Reforma, así como la estrategia que conduzca al diseño y aplicación del nuevo modelo universitario.

3.4.2 Estrategia para la Reforma Universitaria

El Documento Base comprende un programa general de trabajo con seis etapas, para desarrollarse en un lapso de dos años y medio. Las etapas de corto, mediano y largo plazo, y los tiempos estimados para su ejecución, son las siguientes: Reactivación y Despliegue (periodo julio-diciembre de 2000); Despliegue y Diseño (periodo enero-junio y agosto-diciembre de 2001); Aplicación, Evaluación y Pre-consolidación (periodo enero-junio y agosto-diciembre de 2002).

La elaboración de los programas de actividades, para cada una de las etapas y los tiempos señalados, quedará a cargo de la Comisión para la Reforma Universitaria a través del proceso de consulta que se realice entre los diferentes sectores de la comunidad universitaria.